Apr 13, 2011 | África, ONU, Passage au crible (espagnol)
Por Philippe Hugon
Traducción: Maricarmen Gonzalez Cisneros
Passage au crible n°37
El es presidente marfileño Laurent Gbagbo fue arrestado el lunes 11 de abril del 2011 después de más de cuatro meses de conflicto y de combates que sumergieron Abiyán en el caos, estas últimas semanas. El presidente electo, Alassane Ouattara accedió al poder con el apoyo de las fuerzas armadas de las Naciones Unidas y de Francia.
> Contexto histórico
> Marco teórico
> Análisis
> Referencias
Contexto histórico
Desde hace más de diez años la Costa de Marfil se encuentra estancada en una gran crisis. Efectivamente, las elecciones presidenciales del 28 de noviembre del 2010, después de cinco anos de aplazamiento, no desbloquearon la situación. El 3 de diciembre, las Naciones Unidas, la Unión Europea, Francia, los Estados Unidos, la CEDEAO y la Unión Africana van a reconocer Alassane Ouattara como el vencedor. Las sanciones jurídicas (amenazas de la CPI, el congelamiento de las ayudas de la Unión Europea) o económicas (del FMI del Banco Mundial, de la BCEAO) fueron aplicadas contra Laurent Gbagbo, quien fuera asfixiado progresivamente en la esfera económica. Al mismo tiempo, las fuerzas militares de Alassane Ouatara se reforzaron disponiendo del apoyo de facto de la ONUCI y de la fuerza francesa Licorne. Después de fracaso del panel de cinco jefes de Estado, delegados de la Unión Africana el 28 de enero del 2011, las Fuerzas republicanas de la costa de Marfil pro Ouattara (FRCM), lanzaron una fuerte ofensiva tocando Abiyán el 31 de marzo. Las fuerzas de las Naciones Unidas (ONUCI) y francesas (Licorne) intervinieron el 4 de abril después del voto de la resolución 1975 (30 de marzo) del Consejo de Seguridad aspirando a “prevenir el uso de armas pesadas amenazando a los civiles”.
El origen de la difícil situación en la Costa de Marfil es antiguo y las elecciones desgraciadamente no pudieron ponerle un fin. En el 2000, Laurent Gbagbo fue elegido presidente de la República en medio de una serie de “calamidades” según sus propios términos, sin que Alassane Ouattara fuera autorizado a presentarse. En el 2002, las nuevas fuerzas del Norte dirigidas por Ghuillermo Soro fueron detenidas antes de llegar a Abiyán, dividiendo al país. Después del fracaso de los acuerdos de Marcoussis (enero de 2003) varios afrontamientos entre las fuerzas de Laurent Gbagbo y las fuerzas francesas se desencadenaron. Aun asi, los acuerdos de Ouagadougu del 4 de marzo del 2007 representaron un avance, a pesar de la división del país. La presencia de los cascos azules (más de 9000 hombres y casi 11000 en marzo 2011) y los soldados franceses de la Licorne (900 en un principio y después 1650 en abril 2011) volvieron imposible un conflicto generalizado, aunque el desarme de las nuevas fuerzas y de las milicias no pudiera realizarse antes de las elecciones. Finalmente, Laurent Gbagbo perdió las elecciones pero se mantuvo en el poder practicando una política radical.
Marco teórico
La crisis en la Costa de Marfil revela dos líneas de fuerza:
1. Opone dos concepciones de las relaciones inter y transnacionales: la soberanista, etno -nacionalista y anti colonialista dentro de la cual jugaba Laurent Gbagbo apoyado por cientos de países africanos como Angola o África del Sur, actores que no dejaron de presentar a las Naciones Unidas como una fuerza de injerencia. El segundo enfoque internacionalista y legalista, el de las Naciones Unidas, el de las potencias occidentales y de la gran mayoría de los países africanos, apoyos de Alassane Ouatara.
2. Subraya la ambigüedad y la relativa impotencia de las acciones inter y transnacionales. Efectivamente, la átona Unión Africana fracasó diplomáticamente. En cuanto a la CEDEAO, esta no pudo enviar las tropas de la ECOMOG para apoyar las fuerzas pro-Ouattara. La Unión Europea, por su parte estuvo muy poco presente. Finalmente, la asfixia económica y financiera fue utilizada por la BCEAO, Francia y los Estados Unidos mientras que las Naciones Unidas reforzaban, demasiado tarde, el mandato de la ONUCI. Francia, quien privilegió el multilateralismo e intervino militarmente bajo el mando de las Naciones Unidas, prefirió la injerencia en lugar de la no-asistencia con el riesgo de ser percibida como una antigua potencia colonial.
Análisis
La crisis política resulta de la débil legitimidad de responsables políticos del post-Houphouët (muerto en 1933), conjugado con la creación y la exacerbación etno-nacionalista de la marfilidad forjada por Konan Bédié. La crisis económica se explica a través del final del milagro marfileño fundado sobre la colonización de las tierras, la redistribución territorial de la renta del cacao, la creación de empleos y el aumento del ingreso per cápita. La antes floreciente economía – principalmente gracias al cacao – no pudo reponerse de la guerra civil de 2000-2003 ni de los años de inestabilidad que le siguieron. La baja de más de la mitad del ingreso per cápita entre 1990 y 2010, la explosión demográfica la más elevada del mundo y la alta tasa de inmigración constituyeron una configuración favorable a una etnización del juego político.
La crisis social reenvió a una oposición entre los olvidados (bajo el proletariado urbano, diplomados sin empleo) sensibles al discurso etno-nacionalista y los ricos mas de frente con la postura tecnocrática de un Ouattara. Sin embargo, el mestizaje es antiguo y las elecciones mostraron que los determinantes de los votos no relevaban de criterios étnicos o religiosos. Por el contrario, si los referentes identitarios no son el origen de la crisis, el odio y la violencia se avivan sin duda por la inseguridad del empleo y del ingreso.
Frente al irrespeto de los resultados electorales, la legalidad interna y la legitimidad internacional se situaban del lado de Alassane Ouattara. En cuanto a Laurent Gbagbo, este ultimo disponía de la movilización de jóvenes patriotas con una importante potencia de armas (fuerzas especiales, mercenarios, responsables de la armada) y de una legitimidad de parte de un sector de la población del Sur. Efectivamente este último estaba persuadido que había ganado las elecciones presidenciales y que se estaba asistiendo por consecuencia, a una injerencia, o hasta a una recolonización de la Costa de Marfil.
Salpicando a toda África del Oeste, dicha crisis marfileña muestra cambios esenciales en el equilibrio de fuerzas entre los actores marfileños, africanos e internacionales. Si oficialmente Francia no quería ejercer el papel de guardia de África, su acción militar fue determinante en la caída de Laurent Gbagbo. A este efecto, recordemos que su interés en la Costa de Marfil –locomotora de la UEMOA- es inmenso pues se trata de que Paris mantenga la presencia económica de grandes grupos industriales y de un buen número de franceses, al mismo tiempo asegurando la defensa de la francofonía. Ciertamente Laurent Gbagbo recibió el apoyo de responsables africanos como Jacob Zuma o dos Santos acordándose de su postura anti apartheid en la época en la que se oponía a Hophuët-Boigny. Por otro lado, varios miembros de la Unión Africana – habiendo ellos mismos tomado el poder por las armas – no estaban más preparados a reconocer los resultados de la elección. Finalmente, apoyos externos mostraron que ciertos países de África del Sur, China o Rusia tenían un cierto peso en el juego africano. Finalmente, fue la legalidad de la ONU la que triunfó.
Después de la caída de Lurent Gbagbo, los nuevos retos son importantes. Un gobierno de unión nacional y una comisión de reconciliación, justicia y perdón deben constituirse próximamente. Es el deber del presidente Alassane Ouattara de cumplir con lo esencial: reconstruir una armada nacional, desarmar la población y operar el relance económico, impulsando, al mismo tiempo una unificación territorial y un deseo colectivo de vivir.
Referencias
Bouquet Christian, Géopolitique de la Côte d’Ivoire, Paris, A Colin, 2005.
Hugon Philippe, « La Côte d’Ivoire plusieurs lectures pour une crise annoncée » Afrique contemporaine, (206), été 2003.
International Crisis group, « Côte d’Ivoire ; faut il se résoudre à la guerre ? Synthèse et recommandations » Rapport (171), 3 mars 2011.
Tapinos Georges, Hugon Philippe, Patrice Vimard, La Côte d’Ivoire à l’aube du XXIe siècle, Paris, Karthala, 2002.
Apr 1, 2011 | China, Diplomacia, Passage au crible (espagnol)
Por Jenna Rimasson
Traducción: Maricarmen Gonzalez Cisneros
Passage au crible n°36
El 11 de marzo del 2011, Japón vivió un terremoto de una magnitud de 9 en la escala de Richter, con epicentro en el Océano Pacifico. Las sacudidas desencadenaron inmediatamente un tsunami que destruyó la costa Este del archipiélago, región donde se concentran las centrales atómicas del país. A esta crisis humanitaria se agrega una catástrofe nuclear que concierne al mundo entero. El Estado chino, vecino cercano de Japón reaccionó rápidamente ante la tragedia nipona. Envió equipos de socorristas, material de urgencia para los supervivientes y hasta combustible, mientras que por otro lado se organizaba la colecta de donaciones en las Universidades y en algunas plazas públicas. Por último, el gobierno chino evacuó 3000 residentes de las zonas siniestradas. Esta situación condujo China a preguntarse sobre su propia gestión de la energía atómica.
> Contexto histórico
> Marco teórico
> Análisis
> Referencias
Contexto histórico
En 1821, el Tifón Kamikaz (viento divino) destruyó la flota mongol de Kublai Khan, quien intentaba de invadir el archipiélago japonés. Este elemento natural garantizó la independencia del país respecto del Imperio de en medio, situación preservada hasta la Segunda guerra mundial.
Inversamente, China conoció derrotas mayores frente a Japón, en 1895 y 1931. La última se terminó en 1945 con la ocupación nipona de Manchuria. Es la fecha en que las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki obligaron a Tokio a capitular. Dichos episodios históricos siempre provocan tensiones diplomáticas, como demuestra la visita del Primer Ministro Japonés Koizumi al santuario del shinto en Yasukuni (Tokio) o las reivindicaciones territoriales de China sobre las islas Diaoyu. Sin embargo, el sismo ocurrido el 12 de mayo del 2008 en la provincia china de Sichuan permitió un acercamiento sino-japonés. Efectivamente, Pekin aceptó la ayuda humanitaria ofrecida por los equipos japoneses.
Tratándose globalmente de la carpeta nuclear, recordemos que la RPC pertenece a las potencias nucleares, el primer ensayo se realizó el 16 de octubre de 1964 en Lop Nor, en la provincia de Xinjiang. En 1984, se integra como miembro de la AIEA (Agencia Internacional de la Energía Atómica) y el 9 de marzo de 1992, después de años de rechazo, Pekin ratifico finalmente el TNP (Tratado de no proliferación nuclear).
Marco teórico
1. Ayuda de urgencia: En caso de catástrofes naturales, los Estados y las ONG – particularmente las de dimensión internacional – procuran una ayuda financiera y material a las regiones siniestradas. Además del testimonio de compasión, esta asistencia incrementa la visibilidad del donador, permitiéndole mostrar sus valores éticos en la escena internacional.
2. Reapropiación de la acción diplomática a través de medios informales: Los actores de la sociedad civil esquivan las instituciones tradicionales haciendo funcionar una política extranjera diferente a la de los Estados. Este fenómeno ilustra la revolución de actitudes evocada por el especialista en Ciencia Política, el americano James Rosenau, quien invita a reevaluar el papel y la tomar en cuenta el mixing micro-macro.
Análisis
Las relaciones sino-japonesas, atraviesan actualmente una etapa difícil, ya sea con respecto a las crispaciones militares en el mar de china o respecto a la crisis económica fuertemente resentida en Japón. Frecuentemente paralizadas, las instituciones diplomáticas tradicionales impiden un real dialogo entre Pekín y Tokio. En cambio, el terremoto de Sichuan y el que arrasó con la isla de Honshu, fueron la ocasión perfecta para mostrar gran solidaridad entre estos dos pueblos. Efectivamente, los chinos se acuerdan de la ayuda ofrecida por sus vecinos y en esta ocasión se movilizan para venir en ayuda. Una interacción micro-social a escala individual se establece volviendo evidente la erosión del marco estatal-nacional. En este contexto de crisis y urgencia, las administraciones centrales del Estado y del PCC son omitidas en beneficio de la escala local – las ciudades hermanas de las municipalidades japonesas participan actualmente – además las de la sociedad civil con la intervención de asociaciones y de ONG nacionales, como la Cruz Roja china por ejemplo. Aquí vemos la necesidad de una acción rápida favoreciendo una nueva distribución de la autoridad en favor de las entidades supranacionales y transnacionales. La dinámica cooperativa que se instala, obliga a los poderes políticos a modificar su estrategia, es decir el juego diplomático de estos nuevos actores exigiéndoles modificar sus posiciones iniciales. Frecuentemente criticadas por su falta de autonomía, las ONG chinas ahora utilizan sus relaciones privilegiadas con el gobierno para modificar las decisiones de este último. Dichas organizaciones se imponen frente a las instituciones políticas, gracias a su repertorio de acciones más apropiado y de su fuente de legitimidad venida desde abajo. Con el paso del tiempo, se vuelven las interlocutoras indispensables, mientras que el Estado chino trata de mantener sus monopolios a pesar de las oposiciones. Esta operación se vuelve más fácil que la ayuda que se ofrece a los habitantes del archipiélago, concordando con la concepción china de los Derechos Humanos, orientada hacia una visión más económica y social y menos política. Por otro lado subrayemos que la crisis que afecta a Japón beneficia igualmente las relaciones sino-taiwanesas a través del desarrollo de una cooperación sostenida en materia de prevención de riesgos sanitarios y de la ayuda de urgencia.
El impacto sobre las políticas pekinesas también se revela a través del avance de la Administración del Estado por la Seguridad nuclear y el importante papel acordado al Ministerio del Medio Ambiente. Sin embargo, el creciente peso de los expertos de la toma de decisiones del Zhongnanhai constituye el elemento más notable, puesto que el saber se volvió la herramienta legitimadora, susceptible de modificar la jerarquía de las prioridades de la agenda gubernamental. Pekín, quién maneja actualmente la construcción de 25 centrales atómicas, de las cuales 13 ya se encuentran en actividad, acaba de congelar la decisión de construir nuevas infraestructuras, decidiendo reforzar sustancialmente las normas de seguridad, los sistemas de alerta/medida de la radioactividad.
Los elementos naturales y la tecnología del átomo pesan el mismo peso en las relaciones sino-japonesas que en las cuestiones de seguridad nacional de salud pública. Imponen a los dirigentes chinos más transparencia y una mayor toma en cuenta de la opinión pública. Sin embargo, las necesidades energéticas de China recuerdan al gobierno prioridades de otro orden. Efectivamente, en 2007, Pekín firmó con la empresa francesa Areva, el más grande contrato jamás conocido en la historia del dominio nuclear de un valor de 8 mil millones de euros –con el objetivo de incrementar su producción energética y adquirir una nueva tecnología: los famosos reactores de generación EPR. La explotación de la energía atómica esta –como en varios países- sometida al secreto de defensa y en consecuencia resulta difícil de abordar en un debate democrático. Aun así, los convenios que se establecen entre las esperas públicas y privadas en este sector estratégico revelan un cierto debilitamiento del Estado en provecho de las entidades económicas.
Referencias
Areva, « Dossier de presse. Areva en Chine », nov. 2007.
Fossier Astrid, « Présentation générale de la société civile en Chine », Monde chinois, (19), aut. 2009, pp.9-14.
Niquet Valérie, « Du Tremblement de terre du Sichuan aux Jeux olympiques : la Chine face aux défis politique de l’année 2008 », Asie Vision, (8), sept. 2008, en ligne, www.ifri.org/downloads/Asie_Visions_8_Niquet.pdf, consulté le 10 juillet 2010
Xinhuawang, « La Chine accorde avantage d’aide au Japon », 17 mars 2011, En ligne, http://french.news.cn/chine/ 2011-03/17/c_13782500.htm, consulté le 25 mars 2011.
Xinhuanet, « 山西省红十字会开展日本地震后寻人工作 », [La Croix Rouge de la province du Shanxi déploie ses activités de recherche des rescapés japonais après le séisme], le 17 mars 2011, En ligne, http://www.sx.xinhuanet.com/jryw/2011-03/17/content_22301497.htm, consulté le 25 mars 2011.
The Central People’s Government of the People’s Republic of China, « 日本发生特大地震后中国多部委表示向日 提供援助 » [Après le séisme, les différents ministères chinois offrent leur assistance au Japon], le 16 mars 2011, En ligne, http://www.gov.cn/jrzg/2011-03/16/content_1825560.htm, consulté le 25 mars 2011.
Mar 25, 2011 | Desarrollo, Norte-Sur, Passage au crible (espagnol), Pobreza
Por Clément Paule
Traducción: Maricarmen González Cisneros
Passage au crible n°35
El 20 de marzo del 2011, con el levantamiento de los pueblos árabes y africanos el día mundial de la solidaridad fue celebrado en varios países, en Francia en México y en Marruecos. Organizado por la red de asociaciones como ATTAC (Asociación para la imposición de transacciones y por la acción ciudadana) o el CADTM (Comité para la anulación de la deuda de los países del Tercer Mundo) esta movilización fue inicialmente decidida dentro del marco del FSM (Foro Social Mundial) de Dakar. Del 6 al 11 de febrero de 2011, la onceava edición de esta concentración internacional de alter-mundialistas reunió a decenas de miles de participantes en la capital senegalesa. Después de la marcha de apertura de los ciclos de talleres, la Asamblea de movimientos sociales del 10 de febrero 2011 declaró dos iniciativas de convergencia* Además de la fecha del 20 de marzo, la fecha del 12 de octubre de 2011 fue escogida para ser El día mundial de acción contra el capitalismo.
> Contexto histórico
> Marco teórico
> Análisis
> Referencias
Contexto histórico
Recordemos que el primer FSM se realizó en Puerto Alegre del 25 al 30 de enero de 2001, dentro de la prolongación de la movilización contra la cumbre de la OMC (Organización Mundial del Comercio) en Seattle. En este caso, el evento fue creado simbólicamente en reacción al foro económico mundial de Davos. A través de la elaboración de una Carta de Principios, el movimiento de Porto Alegre se dotó igualmente de un Consejo Internacional y de un Comité de organización con el objetivo de asegurar la perennidad del proceso. Aunque el FSM se desarrollara la mayor parte del tiempo en Brasil – cuatro veces en Porto Alegre en 2001, 2002, 2003 et 2005 y a Belem en 2009 – también se le exportó en India – en Mumbai en 2004 –, en África – en Nairobi en 2007 y en Dakar en 2011 – como en Karachi, Caracas y Bamako en el marco del encuentro poli-céntrico de 2006. Aunque la mayoría de los eventos regionales fuera creado con un decenio de anterioridad, con los foros sociales africanos, asiáticos, europeos, magrebíes, etc. Subrayemos que 55 cumbres de este tipo se realizaron en 28 países diferentes en 2010.
Por otro lado, notemos que este fenómeno de dispersión, testifica de la diversificación – al menos geográfica – de públicos y de temas abordados, como el creciente y regular número de participantes. Entre estos últimos, señalemos el nacimiento de líderes carismáticos, en los que la toma de posiciones es importantemente esperada. Citemos Samir Amin, Demba Moussa Dembelé, Gus Massiah, Amina Dramane Traoré y también Immanuel Wallerstein. En 2005, diecinueve personas de este calibre firmaron el manifiesto de Porto Alegre el cual contenía doce posiciones entre las que se encontraba la anulación de la deuda del Sur, la tasa Tobin, el desmantelamiento de los paraísos fiscales, etc. Por tanto, esta declaración quedó huérfana de valor oficial, aunque pueda ser considerada como un soporte al alter-mundialismo. De forma general, los fundadores del FSM y una parte de sus promotores buscaron una forma de crear una tribuna abierta y contestataria, es decir un lugar de intercambio que no fue hecho para decidir. Sin embargo, esta percepción sufrió numerosas críticas recurrentes estigmatizando la ineficacia de una concentración desorganizada que se aparta de la política.
Marco teórico
1. Heterogeneidad del espacio militante. Propuesto por Lilian Mathieu, el concepto de espacio – comprendido como universo de prácticas y de sentidos relativamente autónomo en el seno del mundo social – permite restituir el conjunto de participantes dentro de los cuales, los recursos y el posicionamiento son demasiado diversos. Se trata de subrayar la permeabilidad de las fronteras del alter-mundialismo. De esta configuración, resultan luchas permanentes internas por la definición de esta marca de fábrica y la posibilidad de incursiones para los participantes exteriores.
2. Estrategias de inversión política. A este efecto, dicha plasticidad puede favorecer la reapropiación del evento por los actores profesionalizados del campo político. Localizados a escalas diferentes, las interferencias suscitan controversias y alimentan la naturaleza misma del FSM.
Análisis
Primeramente, la mayoría de los comentadores subrayaron el papel estructurador del foro en la creación de la agenda – agenda setting function – incluyendo temáticas poco mediatizadas. Particularmente señalaron los desafíos que constituye el acaparamiento de tierras – land grabbing – o de los derechos de los migrantes. El surgimiento de estas problemáticas se debe a las concentraciones regionales de 2010, como la cumbre de Cochabamba consagrada al cambio climático. Sin embargo, preguntarse sobre la selección de estas múltiples causas, nos reenvía a la extrema diferencia de los militantes presentes, muchas veces ocultada bajo el vago termino de sociedad civil. Retomando las recomendaciones de Sydney Tarrow, conviene distinguir los actores según sus modos de acción, en lugar de clasificarlos en función de su ideología. Desde entonces las fuertes desigualdades aparecen en el seno del espacio alter-mundialista en primer lugar, y se traducen en dificultades de pequeñas asociaciones capaces de financiar su participación de manera autónoma. Dentro de esta misma lógica, la puesta en obra de actividades – dentro de la desorganización general – favorece las organizaciones acostumbradas al FSM poseedoras de un savoir faire y de medios superiores para manejar las fallas de logística. A pesar de los esfuerzos de la Comisión de metodología del Consejo Internacional – tarificación especial, Dakar expandido, caravanas, etc. – esta marginalización relativa de profanos invalida la idea dentro de la cual existe una estructura equitativa de oportunidades políticas. Mencionemos igualmente las grandes disparidades geográficas a pesar de la presencia de delegaciones de cerca de 130 países. Si el Foro permanece siendo antes que nada un lugar de encuentros y de redes, los grandes coordinadores – CRID (Centro de Investigación y de Información para el Desarrollo), ActionAid, Vía Campesina, etc. – ocupan una posición central. De lo anterior atestiguan las 800 adhesiones que fueron permitidas gracias a la creación de ATTAC-Senegal.
Sin embargo, esta heterogeneidad parece estar favorecida por un Foro concebido como un espacio abierto, prohibiendo toda toma de decisiones oficial. En este mismo sentido, el sexto principio de la Carta afirma que nadie está autorizado a expresarse a nombre del FSM, el documento proclama de manera más general, la independencia hacia la política. Desde el punto de vista de Chico Whitaker, el rencuentro internacional debe de asimilarse al bien común de la humanidad que no puede ser ni privatizado ni verticalizado. A este efecto, la gestión material puede parecer equívoca, principalmente a causa de la incertitud financiera de los organizadores. Citemos la contribución substancial de Marruecos, aun cuando su gobierno mandó oficiosamente una delegación de agentes para oponerse a la presencia saharaui en el Foro. Más tarde, las autoridades senegalesas acogiendo la Cumbre adoptaron una actitud ambigua, calificada de resistencia pasiva, casi de sabotaje por Immanuel Wallerstain. Las críticas fijaron sobre todo al presidente Wade quien había mostrado su distanciamiento hacia el alter-mundialismo en una conferencia organizada el 7 de febrero. Mientras que se perfilan las elecciones presidenciales de 2012, el clima de tensiones sociales que reina en Senegal y la protestación creciente – exacerbada por la cuestión del deslastre y del desempleo – condujeron a Wade a impedir la reunión internacional. Si su invitación al Foro suscitó vivas polémicas, el discurso de apertura pronunciado por Evo Morales también fue blanco de protestas. El presidente Boliviano, como el dirigente Brasileño Lula, insistieron en la necesidad de cambiar las cosas accediendo al poder, inversamente a la estrategia dominante del Foro que pretendía excluir la política. Mientras que los militantes – como Gus Massiah – pudieron denunciar la recuperación de sus posiciones por el G20, como la tasa Tobin y el control de los paraísos fiscales. Como lo resume Samir Amin, “Los FSM aun están […] por los suelos, siempre “retrazados” respecto al progreso registrado en el terreno por las luchas”. Dicho economista evoca una relativa desconexión entre los movimientos tunecinos o egipcios y el Foro, tomando en cuenta la importancia de las delegaciones venidas del Magreb y del Machrek, y de la importancia de la puesta en marcha de once foros sociales en la región en 2010.
Referencias
Mathieu Lilian, “L’espace des mouvements sociaux”, Politix, (77), 2007, pp. 131-151.
Revue française de science politique, « Les ONG face aux mouvements altermondialistes », 54 (3), juin 2004.
Tarrow Sidney G. The New Transnational Activism, Cambridge, Cambridge University Press, 2005.
Wallerstein Immanuel, “The world social Forum, Egypt and Transformation”, 20 fév. 2011, à l’adresse web : http//www.iwallerstein.com/the-world-social-forum-egypt-and-transformation/[10 mars 2011]
* Para una síntesis que trate de las grandes líneas de este evento, cf. « Foro Social de Dakar, 6-11 de febrero 2011 », Fil d’Arianne
Feb 3, 2011 | Passage au crible (espagnol), Unión Europea
Por Klaus-Gerd Giessen
Traducción: Maricarmen Gonzalez Cisneros
Passage au crible n°34
El 17 de diciembre de 2010, la Unión Europea acordó a Montenegro el estatus oficial de candidato a la adhesión. Hasta hoy, es el único Estado autorizado por el Consejo europeo a adherirse al grupo compuesto por Croacia, Islandia, Macedonia y Turquía, mientras que las demandas de Albania y Serbia han sido rechazadas. Unos días después de esta decisión, el Primer ministro Milo Djukanovic dejo las funciones que ejercía casi sin interrupción desde 1991. Estos dos eventos se encuentran íntimamente ligados.
> Contexto histórico
> Marco teórico
> Análisis
> Referencias
Contexto histórico
Milo Djukanovic tomó las riendas del poder a los 29 años, mientras que Montenegro formaba todavía una parte de Yugoslavia. Con el apoyo de su mentor, Slobodan Milosevic, logró la revolución anti burocrática dentro de la Liga de los Comunistas. Desde entonces Djukanovic a reinado sobre este pequeño Estado balcánico, salvo únicamente una sola interrupción de 16 meses (octubre 2006-febrero 2008). Después cumplió con cinco mandatos como Jefe de gobierno y dos como Presidente. Comenzando su carrera política como Comunista dogmatico, rápidamente se convirtió al nacionalismo serbio en época de las dos guerras de secesión que sacudieron Yugoslavia durante los años 90’s. Después se opuso a su gran y antiguo aliado Milosevic antes de encarnar un leadership independentista que se concretizó por la secesión de Serbia en 2006.
El proceso de ampliación de la Unión Europea a 27 Estados miembros, parece bloqueado desde los referéndums de 2005 sobre la Constitución Europea y debilitado aún más desde la severa crisis económica de 2008-2009. Se siente un cierto cansancio de adhesión tomando en cuenta que Croacia todavía no puede finalizar su proceso de adhesión, sobre todo respecto a los acuerdos de estabilización y de asociación.
Marco teórico
Dos factores explicativos se conjugan:
1. El manejo unilateral de todas las etapas del proceso de adhesión por la Unión Europea revelando una palanca eficaz de Soft Power. Esto permite a la Unión Europea de influir en la política interior de los países con deseos de unírsele.
2. Ciertas fuerzas endógenas aún son capaces de resistir estructuralmente a la tutela de Bruselas y de adaptarse a la presión.
Análisis
El estatus de candidato oficial a la adhesión fue acordado a Montenegro a cambio del abandono de Milo Djukanovic de las funciones de Estado. Este último, quien beneficiaba del apoyo de Silvio Berlusconi se volvió con el transcurso de los años, una figura inquietante para la mayor parte de los jefes de Estado o de gobierno de la Europa del Oeste. Se encontraba a la cabeza de un país progresivamente transformado bajo su batuta, en estructura neo patrimonial. También dirigía un clan que algunos observadores califican de mafioso. Por otro lado, implicado en innumerables tráficos y asuntos de corrupción, Djukanovic fue juzgado intratable desde que el gigantesco contrabando de cigarros que avaló (y que posiblemente supervisó) entre 1995 y 2002 hizo perder millones de euros en impuestos a los miembros de la Unión Europea. Finalmente su régimen, elegido con toda la apariencia democrática posible, intimidando regularmente los medios de comunicación independientes. Jueces italianos y alemanes se interesaron de cerca en su caso pero fueron obstaculizados en sus investigaciones por la inmunidad de la que beneficiaba gracias a su estatus de primer ministro o presidente.
Dominando las estructuras locales del poder, profundamente irrigadas por la corrupción y la compra de votos, la salida de Djukanovic – a la edad de 48 años solamente – fue impuesta desde el exterior. Ayudado principalmente por Alemania, la Comisión Europea discretamente hizo entender que Montenegro no accedería a su estatus de candidato mientras que dicho candidato siguiera en su puesto. La promesa de dejar el puesto condujo entonces a la decisión del Consejo Europeo del 17 de diciembre de 2010.
De hecho, Bruselas ejerció presiones como resultado de los problemas encontrados en la última ampliación europea, hecha realidad el 1 de enero del 2007. En efecto, Bulgaria y Rumania admitidos en le seno de la Unión Europea aunque se hayan emitido algunas dudas sobre la integridad de sus sistemas judiciales, su nivel de corrupción y su voluntad gubernamental de luchar contra el crimen organizado, fueron objeto de un seguimiento totalmente inédito por parte de Europa. Cuatro años más tarde, el progreso en la materia resulta insuficiente. Regularmente reprendidos por la Comisión, por la pasividad de sus élites políticas, los dos nuevos integrantes aun están gangrenados por la corrupción y el crimen organizado. Se trata de un verdadero maquillaje de las instituciones europeas hecho aún más evidente con el bloqueo de importantes subvenciones a Bulgaria que finalmente no cambiaron la situación. Es la razón por la que la Comisión Europea decidió cambiar de estrategia y de exigir, de ahora en adelante, un nivel aceptable de lucha contra la corrupción y el crimen organizado, de preferencia antes de toda negociación de adhesión, si no es que al término de esta. Se trata de la credibilidad del proyecto de integración europea donde el corazón sigue siendo el despliego de un mercado único plenamente transparente, funcionando sin obstáculos salvo los obstáculos legales. Croacia ahora sufre el desgaste (aunque tardío), por que el Primer ministro Ivo Sanader se encuentra desde el 10 de diciembre de 2010 en prisión, después de haber sido acusado de estar implicado directamente en varios delitos de corrupción que sacudieron Croacia.
Queda en duda si la nueva estrategia de la Unión Europea realmente permitirá favorecer las reformas estructurales. En el caso de Montenegro hay serias dudas pues el ex Primer ministro Milo Djukanovic no se retiró de la política y quedó a la cabeza del principal partido gubernamental DPS, el cual remplazó a la antigua Liga de los Comunistas. Entonces continuará controlando el gobierno del nuevo Primer mininstro, Igor Luksic, un joven tecnócrata de 34 años de edad. Falta agregar que el margen de maniobra de este último para modernizar el país y entablar negociaciones de adhesión parece ser severamente estrecho. Hay que obtener la prueba de que si el Soft power de la Unión Europea posiblemente logra influenciar los acontecimientos, no logra influir en las estructuras – en este caso patrimoniales – al interior de los Estados de su propia periferia.
Referencias
Giesen Klaus-Gerd, « La crise économique et l’érosion de la souveraineté monténégrine », Le Courrier des Balkans, 31 mars 2009, http://balkans.courriers.info/article12586.html
Krifa-Schneider Hadjila (Éd.), L’Élargissement de l’Union européenne, Paris, L’Harmattan, 2007.
Sajdik Martin, Scwarzinger Michael, European Union Enlargement, New Brunswick, Transaction Publishers, 2008.
Telo Mario, Europe: A Civilian Power?, Basinstoke, Palgrave/Macmillan, 2007.
Jan 20, 2011 | Derechos Humanos, Passage au crible (espagnol), Unión Europea
Por Catherine Withol de Wenden
Traducción: Maricarmen Gonzalez Cisneros
Passage au crible n°33
Durante el verano 2010, el gobierno francés decidió expulsar hacia Rumania en su mayoría a los Roms que se encontraban acampando en Francia en zonas ilícitas. A cambio, se propuso a voluntarios una simbólica suma de 300 euros. Resaltó a los titulares en los países europeos y hasta las instituciones de Bruselas el argumento utilizado, bajo el cual se les hacía responsables penalmente de su campamento establecido en zonas no autorizadas. Aún siendo la mayor parte de ellos – a excepción de la ex Yugoslavia – residentes de los Estados miembros de la Unión Europea (desde 2007 en cuanto a Rumania y a Bulgaria se refiere) y beneficiando de la libre circulación.
> Contexto histórico
> Marco teórico
> Análisis
> Referencias
Contexto histórico
Según fuentes, esta población alcanza los 9 a 12 millones de personas. De hecho, los Roms provienen de poblaciones indias que se fugaron, desde ya hace más de mil años. Atravesaron Persia, el Imperio Bizantino y Europa Central y Oriental antes de llegar a Europa del Sur, principalmente España. Dicho de otra manera, son parte de la historia de Europa desde la Edad media. Hoy se cuentan en Rumania cerca de 2,4 millones (el 10% de la nación), 800 000 en Bulgaria, (10% de la población), 800 000 en España, 600 000 en Rusia, 600 000 en Hungría, 500 000 en Turquía, 400 000 en Francia, y 150 000 en Reino Unido (según cifras y datos de la Cruz Roja de 2008).
Se encuentran igualmente presentes en Estados Unidos y en Canadá desde el siglo XIX, así como en Israel, estos últimos veinte años. Notamos Igualmente su presencia en Alemania, en Portugal, este último los deportó hacia sus colonias africanas y hacia Brasil en el siglo XVII. Sin embargo, hoy son abundantes en Europa Central y Oriental donde integran una parte importante de la población, entre el 5 y el 10%. La mayoría se volvió sedentaria, mientras que el resto sigue siendo nómada. Estos últimos son llamados en Francia como “personas de viaje”, como otros itinerantes que no son Roms. Subrayemos que todos los Roms no son nómadas y que todas las “personas de viaje” no son Roms. Por ejemplo, algunos franceses ejercen oficios de viaje –mercados foráneos, teatros ambulantes o circos- desde hace ya generaciones enteras sin ser considerados como Roms.
Marco teórico
Retengamos dos líneas de fuerza:
1. La cuestión del control de fronteras por un Estado. Francia intervino en un contexto europeo donde la libertad de circulación de los europeos de la Unión figura entre los derechos esenciales de los ciudadanos europeos.
2. La soberanía de un Estado europeo sobre un caso demasiado europeanizado. Esto significa que la gestión de los flujos migratorios no puede depender de la única competencia y de la única autoridad soberana de un Estado miembro. Este último debe contar con autoridades de Bruselas y decidir con ellas.
Análisis
Ciertamente el gobierno francés podía infligir sanciones penales a los Roms y a otros nómadas por campar de forma irregular. Empero innumerables municipios no respetan las leyes ordenando prever un espacio de ubicación cuando hay un numero de habitantes determinado. Por otro lado, no se podía conducirlos a la frontera, como simples migrantes extra-europeos en situación irregular, aunque se les haya otorgado la suma de 300 euros. El segundo punto se convierte también en problema, queda sin resolver la interrogante étnica: ¿Cómo decidir que se trata de Roms cuando Francia no posee estadísticas étnicas oficiales? Una circular del 5 de agosto de 2010 del Ministro del Interior Brice Hortefeux, los designó como Roms, antes de que la declaración fuera retirada inmediatamente frente a la reacción de los medios de comunicación y de la opinión pública. Numerosos intentos a la deontología de la seguridad por parte de la fuerza de policía estuvieron al día con respecto a los Roms. Es evidente que la operación se inscribía en la sola preocupación de seducir una cierta parte de la opinión pública –de derecha- frente al fracaso de otras disposiciones, como el debate sobre la identidad nacional. Sin duda, ésta política apareció a las autoridades francesas más legítima, frente a la “soledad” francesa en el caso. En Italia, la capital se perdió por la izquierda socialista, en las últimas elecciones municipales sobre el tema de la inseguridad; la derecha criminalizó la cuestión de los Roms, después de haberla defendido con éxito en pleno corazón de su campaña electoral.
El 15 de octubre de 2010, una recomendación del Parlamento europeo condenó la expulsión de los Roms. A esto le siguió una intervención del Comisario de la justicia Viviane Reding, quien comparó el periodo actual al de los años 40’s. Se inclinó igualmente en ese sentido la posición del Consejo europeo. La política francesa fue descreditada por Bruselas y el caso francés se mediatizó ampliamente en el extranjero. En efecto, los Roms representan una población que ya ha sido víctima de varias persecuciones. De esta manera fueron excluidos durante varios siglos en Europa del Este y del Oeste antes de ser gravemente perseguidos en época del nazismo. Recordemos que en Rumania, fueron obligados al esclavismo hasta 1865, después forzosamente sedentarizados durante el comunismo, como en los otros países de Europa central y oriental. Fuertemente discriminados y privados del derecho de sus ventajas sociales desde la caída del muro de Berlín, algunos de ellos se volvieron nómadas , como sus compatriotas rumanos y búlgaros que no son Roms, anticipando sobre la libertad de circulación desde el principio de los años 90’s. Finalmente, adquirieron el derecho respectivamente en 2000 (Bulgaria) y en 2001 (Rumania). Pero no beneficiaron de la libertad de trabajo ni de instalación sino hasta 2004.
Durante el verano de 2010, el “asunto” de los Roms fue revelador del tratamiento improvisado y unilateral de esta cuestión europea por Francia. Dicho asunto suscitó la reacción del gobierno rumano, con el cual los responsables franceses ya habían tenido varios encuentros bilaterales en el transcurso de los cinco últimos años. Bucarest deploraba que una confusión entre Roms y rumanos pudiera insinuarse. Pero Rumania demostró aún más que Europa existe como garante y defensora de los Derechos humanos cuando se sobrepasaban los límites al respeto de los Derechos. A este respecto, la réplica del Comisario europeo a la Justicia y las avivadas reacciones del Consejo europeo de octubre de 2010 recordaron que las instituciones de Bruselas se encuentran vigilantes en el momento en que los Derechos de los europeos se encuentran amenazados.
Referencias
Sur les roms en Europe : La Croix, 10 Aout 2010
Sur les roms en général : revue Etudes tziganes
Alain Reyners (ULB) : http://www.iiac.cnrs.fr/lau/spip.php?article129