PAC 87 – La puesta en riesgo de la biodiversidad por las soberanías estatales La décimo sexta Conferencia de las Partes de la CITES, Bangkok, del 03 al 14 de marzo de 2013

Por Valérie Le Brenne

Traducción: Daniel Del Castillo

Passage au crible n°87

Del 03 al 14 de marzo de 201de marzo de 2013 al 14 se llevó a cabo en Bangkok la décimo sexta Conferencia de las Partes de la CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) que reunió a más de 20.000 participantes venidos de 178 países diferentes. En su aniversario número cuarenta, esta manifestación se abrió con un llamado a:” la lucha contra la sobre pesca, la explotación ilegal de los bosques y la criminalidad relacionada con la explotación ilícita de especies animales”. Simultáneamente, los países firmantes retiraron del Anexo I de la Convención varios especímenes que se encuentran en vía de extinción, entre los cuales se encuentra el emblemático tigre de Tasmania.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

Organizada cada tres años desde 1976, la Conferencia de las Partes de la CITES busca representar una instancia mundial de regulación del comercio de especies animales y vegetales, con fines a preservar la biodiversidad. Para esto, se ha dotado de un instrumento de clasificación elaborado a partir de los peritajes científicos más recientes. Elaborado en tres anexos, este corpus de textos forma una pauta evolutiva de uso habitual por los Estados miembros.

Recordemos que la CITES se origina en la resolución adoptada en 1963 por la Asamblea General de la International Union for Conservation of Nature (IUCN), que preconizó la creación de una convención internacional para:”reglamentar la exportación, el tránsito y la importación de especies silvestres escasas o amenazadas”. De hecho, esta primera propuesta nace de la observación sobre la desaparición acelerada de la fauna y flora salvajes, bajo los efectos de su comercialización por poblaciones rurales en situación de pobreza. Al respecto, subrayemos que este procedimiento se inscribe plenamente en las preocupaciones medio ambientales surgidas en los años sesenta y que, desde entonces, ya prefiguraban las cumbres internacionales de los años setenta. No obstante, habrá que esperar la Conferencia de Estocolmo de 1972 para que la iniciativa sea discutida de nuevo, llegando a considerar entonces la realización de una conferencia plenipotenciaria. El 03 de marzo de 1973 ochenta países levantaron el acta de la creación de la CITES, al terminar la Conferencia de Washington.

Desde esta fecha, la cantidad de Partes participantes ha progresivamente alcanzado los 178 Estados, al lado de los cuales intervienen ONGs medio ambientales, así como empresas privadas. En la actualidad, la CITES es probablemente aún la herramienta internacional más ambiciosa en materia de preservación de la biodiversidad. De hecho, treinta mil especies animales y vegetales son objeto de medidas de protección, con una atención específica dirigida hacia ciertos especímenes llamados ”carismáticos”, como lo son el oso polar, los elefantes de África y los tiburones.

Marco teórico

1. La destrucción de un Bien Público Mundial (BPM). En tanto que BPM, las especies de fauna y flora silvestres apelan por la puesta en marcha de una gobernanza global en la cual los Estados sean los principales socios. La construcción de un multilateralismo vinculante parece entonces constituirse como la mejor vía para resguardarlas del comercio internacional que constituye, después de los daños al medio ambiente, el segundo factor de su destrucción.

2. La traba impuesta por las soberanías estatales. La elaboración de la regulación mundial se encuentra limitada por el derecho soberano de los Estados para establecer sus propios marcos legislativos; la producción normativa aparece entonces como el único verdadero instrumento de esta diplomacia de cumbres. No obstante, una cantidad creciente de ONGs medio ambientales denuncian los efectos contra producentes sobre las especies más amenazadas por el comercio ilícito.

Análisis

La realización de la décimo sexta Conferencia de las Partes de la CITES traduce la voluntad de desplegar una gobernanza global que apuntaría hacia la administración sostenible de un BPM. En este sentido, recordemos que una especie sobre cada mil desaparece por año, con una tasa de extinción de cien a mil veces más rápida que el ritmo natural. Si la degradación del medio ambiente bajo los efectos de las actividades humanas constituye el primer ataque a la biodiversidad, la sobre explotación con fines comerciales y la pesca furtiva organizada por redes criminales, representan un segundo factor cuya importancia conviene comprender. De esta manera, se estima que solamente el comercio legal de especies silvestres llega a facturar alrededor de 15 mil millones de euros al año; esto sin contar los beneficios obtenidos por la pesca y el aprovechamiento forestal.

Sin embargo, en ausencia de un Estado mundial que detuviera la legitimidad de instaurar una jurisdicción supranacional en la materia, la regulación del comercio internacional de las especies de fauna y flora salvajes no podría realizarse sin una cooperación interestatal. En consecuencia, el amparo a la biodiversidad implica la construcción de un régimen internacional que permita la puesta en marcha de dispositivos vinculantes, dado el caso que los Estados siguen siendo los principales actores capaces de regular las dinámicas comerciales dentro de las cuales se han insertado.
Desde esta perspectiva, las negociaciones llevadas a cabo durante los distintos encuentros condujeron a la elaboración progresiva de tres anexos que han conformado la herramienta privilegiada en este escenario multilateral. Este corpus de textos, basado en un trabajo científico de censo de las especies vivas, ofrece una clasificación jerarquizada de éstas según que se encuentren: en vía de extinción (Anexo I), en riesgo de extinción so falta de un control riguroso de su explotación (Anexo II), o bien que un Estado haya formulado una solicitud de protección para un espécimen particularmente amenazado en su territorio (Anexo III). A cada Conferencia de las Partes de la CITES corresponde entonces una actualización y extensión del contenido normativo de estos documentos. De manera que las especies oficialmente extintas son retiradas de estas listas, mientras nuevas especies son por ejemplo inscritas. No obstante, este último procedimiento se presta a la confrontación de múltiples intereses, en la medida que requiere la aprobación de la mayoría de los miembros de la Convención. Por otro lado, la existencia de varios regímenes de excepción brinda la ocasión para que ciertos Estados se sustraigan a los mecanismos de regulación, mientras que son susceptibles de ser los más interesados por estas medidas. Citemos al respecto los supuestos objetivos científicos de la caza de ballenas, en virtud de los cuales Japón cuenta con el privilegio de una autorización basada en el Anexo I de la Convención. Todo esto conduce a las ONGs medio ambientales a denunciar con virulencia la componenda a la cual se prestarían los países miembros durante las reuniones de estas conferencias.

Si bien conviene – en el estado actual de las cosas – contar con una regulación del comercio legal de las especies gracias al refuerzo de la implicación de los Estados, subrayemos que ningún componente los obliga verdaderamente. Además, la lucha contra el comercio ilícito ha sido el pariente pobre de la CITES. La extinción de varios especímenes inscritos en el Anexo I de la Convención, más la agravación de la amenaza sobre ciertas especies víctimas de la pesca furtiva, confirman la ineficiencia de este dispositivo. Más grave aún, las orientaciones de la CITES podrían incluso ser susceptibles de provocar efectos contra producentes al aumentar automáticamente el valor mercantil de las especies más amenazadas en los mercados ilegales de especies.

Referencias

Constantin François (Éd.), Les Biens publics mondiaux. Un mythe légitimateur pour l’action collective ?, Paris, L’Harmattan, 2002.
lemonde.fr, Planète, « Constat d’échec pour la défense du monde sauvage », disponible à la page : http://www.lemonde.fr/planete/article/2013/03/02/constat-d-echec-pour-la-defense-du-monde-sauvage_1841752_3244.html, dernière consultation le 31 mars 2013.
lemonde.fr, Planète, « Le commerce d’ivoire qui menace les éléphants d’Afrique, a triplé en quinze ans », disponible à la page : http://www.lemonde.fr/planete/article/2013/03/02/constat-d-echec-pour-la-defense-du-monde-sauvage_1841752_3244.html, dernière consultation : le 31 mars 2013.
Site officiel de la CITES, disponible à la page : http://www.cites.org, dernière consultation : le 31 mars 2013.

PAC 86 – Opacidad de la cadena agroalimentaria, fragilidad de la seguridad alimentaria El escándalo de la carne de caballo, enero-marzo 2013

Por Clément Paule

Traducción: Ulises Aquino Jiménez

Passage au crible n°86

PAC 86, source Flickr MikeySource : Flickr Mikey

El 19 de marzo 2013, La empresa francesa Spanghero estuvo implicada en un nuevo asunto de presunto fraude: 57 toneladas de carne de oveja de origen británico – prohibidas a la importación en la UE (Unión Europea) – fueron descubiertas en sus almacenes. Recordemos que esta firma estuvo implicada un mes antes en un escándalo similar donde la carne de caballo habría sido utilizada para preparar platos cocinados con res. Por lo tanto, la controversia sobre etiquetado de este tipo de productos sobrepasa ampliamente a este actor, ya que incrimina el conjunto del sector agroalimentario en la UE. Conviene observar por otra parte la internacionalización de la polémica que se extendió en pocos días hasta Rusia, República Dominicana e incluso Hong-Kong. Principal respuesta en el corto plazo de las autoridades nacionales, la intensificación de controles ha mostrado otras fallas: citemos los millones de postres comercializados por Ikea, potencialmente contaminados por bacterias coliformes que indicarían contaminación fecal. Mientras que la incertidumbre se mantiene sobre los riesgos sanitarios relacionados a estas falsificaciones, numerosos comentaristas han podido evocar una crisis profunda del sistema agroalimentario en Europa. Señalemos también la publicación en febrero 2013 de una encuesta realizada en Estados Unidos por la ONG (Organización no Gubernamental) Oceana sobre la proveniencia de pescados puestos a la venta en una veintena de estados. Sus investigaciones señalan un problema similar de una amplitud considerable: un tercio de los especímenes analizados no corresponden a la especie mostrada en la envoltura.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

A partir de la segunda mitad del siglo XX, la constitución e integración de la cadena agroalimentaria se desarrolló en numerosos países europeos. Este proceso se caracterizó por el auge del sector privado, en particular el de la distribución a gran escala – a la imagen de empresas como Tesco o Carrefour-, mientras que la mayoría de estados desplegaban nuevamente y de forma simultanea su acción hacia un modelo flexible de regulación. Desde entonces, se trata de un mercado oligopólico y especializado, enmarcado por múltiples niveles de reglamentaciones. Entre estas, mencionemos a escala internacional el Codex Alimentarius definido por la FAO (Food and Agricultural Organization) y la OMS (Organización Mundial de la Salud) desde los años sesenta, completado por las normas ISO (International Organization for Standarization). Los actores estatales intervienen también en el mantenimiento de la seguridad alimentaria mediante las legislaciones nacionales y de agencias como la FSA (Food Standards Agency) en el Reino Unido. Finalmente, señalemos el rol creciente de la UE con la implementación del paquete de higiene – seis reglamentos comunitarios – y la creación de la AESA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) en el curso de los años 2000.

Pero a pesar de estos dispositivos, numerosos crímenes sanitarios han estallado en las dos últimas décadas, empezando por el trauma de la EEB (Encefalopatía Espongiforme Bovina) – más conocido bajo el nombre de enfermedad de las vacas locas – en 1996. Citemos igualmente los episodios de fiebre aftosa en Reino Unido en 2001 y 2007. La más reciente alerta de gran amplitud sigue siendo la epidemia de gastroenteritis y de SHU (Síndrome hemolítico urémico) causada por la sepa bacteriana Escherichia Coli 0104 H4 en 2012. Provocando cerca de cincuenta decesos en Europa, el asunto de la bacteria asesina fue precipitadamente ligado a los pepinos provenientes de España – lo que fue desmentido posteriormente -, acarreando una caída de las exportaciones así como embargos decretados por ciertos países, entre ellos Rusia. Notemos que esas crisis sucesivas revelaron las debilidades de los sistemas de control y descreditado a la industria agroalimentaria tanto como a los poderes públicos, notablemente en Francia y Reino Unido. Es bajo este marco que, los primeros descubrimientos de fraude a la etiqueta ocurren en las islas británicas desde finales del año 2012. Si las críticas se concentraron inmediatamente sobre el grupo Findus – los medios evocan incluso un Findusgate -, Las encuestas dirigidas por las autoridades han progresivamente aislado múltiples cadenas sospechosas, esforzándose en preparar un plan de acción coordinado sobre el plano Europeo.

Marco teórico

1. La imputación de responsabilidad (blaming). Por el momento, los diferentes protagonistas del escándalo no han cesado de presentarse como víctimas, incriminados por necesidad de los otros eslabones de la cadena productiva. Así, se muestra que el conjunto de este circuito opaco parece ilegitimo e incapaz de autorregularse.
2. Las debilidades de la trazabilidad. Después de la crisis de la EEB, el principio de trazabilidad emergió de manera consensual como la mejor solución para restaurar la confianza de la sociedad del riesgo en una industria que perdió credibilidad. Estas prácticas fraudulentas demuestran a la inversa la insuficiencia de ese dispositivo para asegurar la seguridad alimentaria.

Análisis

Este asunto revela en primer lugar la intensificación del proceso de desterritorialización de las actividades económicas transformando el sector alimenticio. Por esto, en este caso toda la cadena es cuestionada, desde los mataderos hasta los grandes distribuidores, pasando por los negociadores. Se trata entonces de decenas de empresas de diversas nacionalidades –Chipre, Francia, Países Bajos, Reino Unido, Rumania, etc.-, lo que testifica la complejidad de un sistema dominado por las firmas transnacionales. Además, las encuestas preliminares confirman el turbio rol de los intermediarios financieros producido entre los productores de carne y la fase de transformación de los productos. Condenada por un delito similar en enero de 2012, la sociedad chipriota de comercio Draap Trading – dirigida por un trader holandés – es así citada como uno de los principales sospechosos en estos presuntos fraudes. Si este escándalo alimentario no puede ser calificado por el momento como crisis sanitaria consideremos sus efectos substanciales sobre la economía: Tesco, líder británico de la distribución a gran escala, ha visto caer brutalmente su participación en el mercado con alrededor del 30%, lo que no se había producido desde hace casi una década. Sin embargo, el ejemplo del grupo Findus, primera empresa en haber sido expuesta mediáticamente, muestra sobre todo la importancia del impacto reputacional en un clima de suspicacia generalizada. Más allá de la caída en las ventas, la imagen de esta firma – y de la cadena que ella encarna – aparece considerablemente empañada.

En este punto, remarquemos la actitud ambivalente de las autoridades nacionales en las cuales la incompetencia en materia de regulación resultó ser sorprendente. Los responsables públicos están en efecto atrapados entre la necesidad de tranquilizar a los consumidores adoptando un cierto número de medidas de investigación y de coerción, moderando un sector poderoso, habituado al auto control. Por esto, los diversos gobiernos involucrados se limitan a la acción retórica: la secretaria de estado británica del medio ambiente por ejemplo ha evocado públicamente una conspiración criminal a escala internacional, mientras que el ministro delegado francés encargado de la economía social y solidaria acusó a la sociedad Spanghero de “engaño económico”. No obstante, estas declaraciones tienden más a estigmatizar uno o varios actores percibidos como desviados que no cuestionan el sistema habiendo permitido estos desbordamientos. Algunos militantes y asociaciones ecologistas han entonces podido denunciar las potenciales colusiones existentes entre la industria y el poder político. Además de la falta de medios de las agencias públicas de regulación, los diferentes estados encuentras por otro lado dificultades en la coordinación de sus planes de acción, como testimonio las tensiones franco-holandesas.

De una manera más general, esos fraudes repetidos destacan la dilución de responsabilidades en el seno de la cadena agroalimentaria, revelando una circulación opaca y fraudulenta de los productos. Esta situación contribuye en consecuencia a fragilizar aún más el equilibrio precario construido en los años ochenta alrededor del principio de trazabilidad. Notemos sin embargo que si este dispositivo busca acercar al ganadero con el consumidor, implica también una racionalización aumentada por técnicas ya utilizadas anteriormente por las firmas, con fines de rentabilidad y estandarización. Así, la trazabilidad constituye ciertamente un medio de control, pero tiende igualmente a dirigir a su paroxismo un modelo agroindustrial que parece poco sustentable a largo plazo. En ausencia de una reforma profunda de los sistemas de regulación, las estrategias de depredación descubiertas por este escándalo parecen caracterizar un nuevo hoyo negro de la globalización económica y financiera.

Referencias

Aginam Obijiofor, Hansen Christina, “Food Safety and Trade Liberalization in an Age of Globalization”, United Nations University Press,Policy Brief (6), 2008.
Andreff Wladimir (Éd.), La Mondialisation, stade suprême du capitalisme, Paris, PUN, 2013.
Granjou Cécile, “L’introduction de la traçabilité dans la filière de la viande bovine “, Cahiers internationaux de sociologie (115), 2003, pp. 327-342.
Hugon Philippe, Michalet Charles-Albert (Éds.), Les Nouvelles régulations de l’économie mondiale, Paris, Karthala, 2005.
Site de la DGCCRF (Direction Générale de la Concurrence, de la Consommation et de la Répression des Fraudes) : http://www.economie.gouv.fr/dgccrf/viande-cheval-dans-plats-cuisines-0 [27 mars 2013].

PAC 85 – El guión dramático de Corea del Norte La tercera prueba nuclear de Corea del Norte, 12 de febrero de 2013

Por Thomas Lindeman

Traducción: Ulises Aquino Jiménez

Passage au crible n°85

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Corea del Norte llevó a cabo, este 12 de febrero de 2013, un nuevo ensayo nuclear. Se trata del tercero después del de 2006 y 2009. La ONU anunció una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad.

El 12 de diciembre de 2012, este país había ya lanzado un misil, presentando la operación como el lanzamiento de un simple satélite. Éste había sido sancionado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El 25 de enero de 2013, Corea del Norte había incluso amenazado a Corea del Sur de un ataque militar si ésta última se adhería a las sanciones económicas de la ONU. Aunque las medidas – la congelación de activos de ciertos ciudadanos y de sus firmas presentes en el extranjero – han sido moderadas por demanda de China, las reacciones norcoreanas fueron muy violentas.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

Ayudada por la Unión Soviética, Corea del Norte apareció después de la Segunda Guerra Mundial en la oposición al antiguo ocupante japonés. Después, su régimen se emancipo progresivamente de sus protectores soviéticos y chinos y ha desarrollado un sistema político tan cerrado como autónomo. Ideológicamente aislado, el régimen norcoreano ha provocado a lo largo de los años siguientes, múltiples crisis internacionales. Además, las maniobras militares surcoreanas cerca de las costas norcoreanas fueron el origen de la confrontación militar limitada entre los dos Estados que se desarrolló en diciembre de 2010.

Marco teórico

Para los enfoques de tipo constructivista, el interés de un actor no existe en sí mismo, él es principalmente moldeado por las creencias colectivas que se construyen en las interacciones. Tratándose de los dirigentes norcoreanos, es en gran medida la defensa de un guión dramático que explica su acción heroica. En la práctica, este término de guión dramático designa una creencia fijada en una superioridad norcoreana frente a la escena internacional. Esta presentación grandiosa de ellos mismos (E. Goffman) permanece sin embargo frágil porque todo participante amenaza permanentemente y de manera potencial este relato. La diferencia entre la imagen reivindicada por los responsables políticos norcoreanos y la imagen reenviada por la escena mundial es siempre susceptible de inspirar acciones especulativas destinadas a confirmar este guión. El guión dramático cuenta con los siguientes elementos:

1. La distribución de caracteres. Cuanto más la presentación de sí mismos reposa sobre una legitimidad carismática y sobredimensionada, más riesgos deben tomar los políticos sobre el plano internacional para probar su carácter excepcional. Además, cuanto más la narración oficial se apoya sobre la imagen de inocentes agredidos – habitualmente los aldeanos, las personas de edad avanzada, las mujeres y los niños – más las opciones pacíficas pueden ser fácilmente señaladas como cobardes. Finalmente una narración en la cual algunos protagonistas son sistemáticamente cosificados y definidos como “cobardes, agresivos, insensibles”, será más voluntariamente susceptible de legitimar una venganza.
2. Las secuencias dramáticas. Cuanto más la historia nacional es presentada de manera victimaria bajo el ángulo de una simple secuencia: agresión (imperialismo japonés, imperialismo americano), sufrimiento (por ejemplo “las mujeres de confort”), réplica (guerrilla, autarquía) y, la violencia parece más justificada. Finalmente, cuanto más la fuerza militar es presentada en el guión dramático como banal, necesaria o incluso gloriosa y su legitimidad será más fácilmente apoyada. Los líderes políticos pueden involucrarse en una política conflictiva a partir de que los extranjeros desestabilicen este guión dramático ya que, una fragilidad como esa produce una pérdida de legitimidad y amenazas a la estima de los que toman las decisiones.

Análisis

La ideología oficial del Juche (sujeto) es menos ligada a la ambición dominadora que se expresa en las relaciones internacionales que a la idea según la cual Corea del Norte debe preservarse de toda influencia extranjera (el término chaju designa la independencia). Su carácter paralizado vuelve a Corea del Norte sujeto de todo cuestionamiento exterior. Recordemos algunos ejemplos que lo testifican: los celulares están autorizados en este país solamente desde 2008 y la comunicación con el exterior es imposible. Por otra parte, todo nos lleva a creer que la agresividad norcoreana proviene también de la preocupación de protegerse contra todo contagio ideológico. Así, tres simples árboles de Navidad puestos cerca de la frontera provocaron vivas tensiones entre las dos coreas en diciembre 2011. La dinastía Kim ¿no es presentada como una familia de dioses laicos divinizada por el padre fundador Kim-Jong-il y su mujer heroica Kim Jong Suk? A este respecto, el calendario norcoreano comienza con el año de su nacimiento. Pero la grandeza de poder se encuentra también materializada en la arquitectura como lo demuestra la torre Juche que mide 150 metros y es coronada por una antorcha iluminada de 20 metros, alumbrando Pyongyang. Bajo la misma lógica, el estadio del 1 de mayo posee una capacidad para recibir 150,000 espectadores, lo que lo hace el más grande el mundo. Esta presentación arrogante de ellos mismos importa para entender las provocaciones norcoreanas ya que, el nuevo líder Kim-Jong-Un tiene necesidad de probar su filiación divina frente a la elite y la población. El lanzamiento del misil del 12 de diciembre de 2012 y este tercer ensayo nuclear del 12 de febrero de 2013 deben en consecuencia ser entendidos bajo el aspecto de una puesta en escena viril de ellos. Mientras que el lanzamiento de Ariane es habitualmente grabado desde una cierta distancia, ese de Corea del Norte es captado desde muy cerca, ilustrando así más fácilmente su poder. Igualmente, la velocidad anunciada de este misil era claramente muy importante por ser de acuerdo a las leyes de la gravedad. Finalmente, el tercero es reivindicado inmediatamente de manera espectacular y provocadora porque en la visión norcoreana del mundo, los otros se presentan como agresores inmutables. Los enemigos son definidos de manera abstracta como imperialistas o dominadores. El criterio de esta calificación continúa siendo el de la clase social. Después del lanzamiento del misil y de la adopción de sanciones por parte de la ONU, el aparato militar enunció entonces ensayos múltiples y un test nuclear de un nivel más alto: tantas decisiones dirigidas contra Estados Unidos, enemigos designados de Corea del Norte.

Si la violencia es oficialmente condenada en ese país, también es banalizada. Los desfiles militares son numerosos y espectaculares, de hecho sus fuerzas militares forman, con 1.2 millones de soldados, el cuarto ejercito del mundo. Los discursos de sus dirigentes dejan pensar que el tabú de recurrir a las armas nucleares está lejos de ser interiorizado y su visión permanece claramente instrumental. Así, el jefe de las fuerzas armadas Ri Yong-Ho prometió en 2010 utilizar armas nucleares “si los imperialistas y sus discípulos infringen aunque sea un poco sobre la soberanía y la dignidad del país”.
Por razones de tipo hubris, narcisismo y de culto de la fuerza, continúa siendo difícil entonces disuadir a los dirigentes norcoreanos incluso si sus ambiciones parecen sobre todo nacionales. La capacidad de controlar la agresividad de Corea del Norte dependerá finalmente de la estrategia más o menos aguda que será desplegada contra ella.

Referencias

Cha Victor, The Impossible State. North Korea, Past and Future, New York, Ecco, 2013.
Goffman Erving, La Mise en scène de la vie quotidienne, 2 vol., trad., Paris Minuit, 1973.
Goffman Erving, Les Rites d’interaction, trad., Paris, Minuit, 1974.
Miller Steven E., Sagan Scott D., “Nuclear Power Without Nuclear Proliferation”?”, Daedalus, 138 (4), Fall 2009, pp. 7-18.

PAC 84 – Malí o las limitaciones de una guerra asimétrica La conferencia de donantes internacionales

Por Philippe Hugon

Traducción: Ulises Aquino Jiménez

Passage au crible n°84

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Una conferencia de donantes internacionales, destinada a financiar el despliegue de una fuerza africana en Malí y la reestructuración del ejército maliense, inició el martes 28 de enero de 2013 en Addis Abeba, en la sede de la UA (Unión Africana). En torno a esta organización, estuvieron reunidos la Unión Europea, Japón, Estados Unidos y la ONU. La UA mostró la necesidad de 460 millones de dólares para la MISMA (Misión Internacional de Apoyo a Malí), de los cuales 240 millones de dólares para la reconstrucción del ejército maliense y el financiamiento de las tropas de Chad. Ella se ha comprometido a aportar 10% de esta suma.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

Adoptada el 20 de diciembre de 2012, la resolución 2085 del Consejo de Seguridad aportó la legalidad y la legitimidad de la ONU. Tenía que haber una negociación política y, en ausencia de, las fuerzas malienses y africanas deben ser apoyadas por fuerzas internacionales. Pero hubo necesidad para Francia de intervenir antes de la presencia de tropas africanas (MISMA), la reconstitución del ejército maliense y la puesta en marcha de un poder legítimo en Malí. El espíritu, si no el escrito, de la resolución 2085 de Naciones Unidas fue en consecuencia respetado. La intervención legal, después de la demanda del presidente Traoré y de la resolución de las Naciones Unidas, no fue condenada ni por Argelia, ni por China o Rusia. Por el contrario, recibió el consentimiento de la gran mayoría de los malienses y de los africanos. Sólo Egipto, Túnez y Qatar la desaprobaron. Francia se encontró en primera fila y en un relativo aislamiento operacional, sin ayuda directa de la Unión Europea, a pesar del apoyo logístico de los aliados occidentales, notablemente britanicos y estadounidense (aviones de reabastecimiento, Transaal, drones y de reconocimiento).

Planeada desde hace tiempo, la intervención militar francesa y maliense (operación Serval), pareció inevitable después del fracaso de las negociaciones sostenidas en Uagadugú y el cambio de posición de Ansar Dine. La conquista de Konna por los yihadistas amenazaba en efecto la base estratégica de Sévaré y les habría permitido descender hacia Mopti y posteriormente la capital, Bamako. Además, el calendario estaba ligado al clima que impide toda operación a gran escala entre marzo y septiembre.

La intervención del 11 de enero de 2013 se tradujo en los ataques aéreos de fuerzas francesas (rafales, mirages, helicópteros) blindajes ligeros y fuerzas terrestres de 2,500 hombres (fuerzas especiales y 250 paracaidistas el 27 de enero en Tombuctú). Después de haber detenido el avance de yihadistas, controlaron el bucle del Níger secundados por las unidades malienses (Gao y después Tombuctú) y de Chad (Nidal o MNLA (Movimiento Nacional de Liberación del Azawad) estaban presentes. Los yihadistas se dispersaron hacia el norte (en su santuario del Adrar de los Ifoghas), y probablemente en el bosque cerca de Diabali, a lo largo de la frontera de países vecinos como Níger. Progresivamente, los Estados aliados de Francia (Alemania, Canadá, Dinamarca, Emiratos Arabes, Italia) apoyaron esta operación a fortiori después de la toma de rehenes en In Amenas, el 16 de enero. Las fuerzas africanas se desplegaron en seguida, particularmente las de Chad, las de Nigeria y las de Burkina Faso.

Marco teórico

1. El conflicto maliense ilustra el modelo de guerras asimétricas. En curso, enfrenta a ejércitos nacionales o multilaterales más o menos bien equipados y motivados a milicias móviles determinadas, fanatizadas, listas para la guerrilla y acciones terroristas. Estas son particularmente heterogéneas. Distinguimos 1) el MNLA compuesto de Tuareg, grupo bereber transfronterizo que es laico, pero reivindica una mayor autonomía para el Azawad, a falta de la independencia. 2) el grupo Ansar Eddine dirigido por Iyad Ag Ghali y próximo del AQMI (Al-Qaeda del Magreb Islámico) que preconiza la Sharia para Malí con una división reciente entre la tendencia yihadista y una parte más cercana del MNLA (el MIA, el Movimiento Islámico del Azawad). En cuanto a los otros grupos, citemos AQMI, el Mujao (Movimiento por la Unificación y la Yihad en África Occidental) disidente del AQMI inmerso en la economía de la droga y Boko Haram llegados del norte de Nigeria.
2. Señala igualmente la dimensión transnacional de los conflictos contemporáneos. Notemos por ejemplo las interdependencias existentes entre los circuitos mafiosos y un islamismo radical que combate la presencia occidental; ésta última ligada a la presencia de multinacionales en los sectores de hidrocarburos y minas.

Análisis

El conflicto de Malí se caracteriza por un entrelazamiento de escalas, un encadenamiento de factores y una pluralidad de actores. Encuentra sus orígenes al mismo tiempo en: 1) las reivindicaciones antiguas de los Tuareg reforzadas por el regreso de los mercenarios de Gadafi, 2) La expansión del salafismo radical y 3) la inserción en una economía criminal con – en el periodo del presidente Touré (ATT) – una colusión en el seno del aparato estatal y el ejército. En realidad, el golpe del 22 de marzo de 2012 no hizo sino acrecentar la descomposición del ejercito al punto que hoy, la descomposición del Estado maliense y de su ejército ha transformado el norte de Malí en un espacio no controlado.

Dado que el norte de Malí no cuenta que por el 5% del PIB del país, conviene tomar en cuenta la dimensión socioeconómica de la crisis Sahel-Sahara. En efecto, con la explosión demográfica que deja a los jóvenes sin perspectivas, se conjuga una proliferación de tráficos, notablemente de drogas y de armas, de crisis medioambientales y alimentarias ligadas al clima y a la vulnerabilidad de los ecosistemas. La inseguridad no ha hecho sino acentuar el debilitamiento del Estado y de las colectividades descentralizadas al punto que Malí podría llegar a ser el epicentro de una crisis que pudiese propagarse en el arco Sahel-Sahara. Las diferentes fuerzas y organizaciones regionales e internacionales apoyan la intervención militar francesa y maliense, como testimonio la conferencia de donantes de Addis-Abeba. Ciertamente, hubo éxito a corto plazo sobre el plano militar por vía aérea (destrucción de depósitos de armas, de combustibles, soporte de pick up) y terrestres (reconquista de ciudades), sin embargo frente a la fuerza del fuego, los yihadistas se negaron al enfrentamiento y se dispersaron, lo que significa que subsistirán durablemente los focos de resistencia en un territorio más grande que el de Francia. Muy determinados, los yihadistas saben diseminarse y realizar ataques sorpresa, guerrillas urbanas. ¿Puede haber un relevo creíble de los ejércitos africanos que por su mayoría no están acostumbrados a estas guerras del desierto? Falta reconstruir el ejército maliense. Ahora bien, existen riesgos inevitables de elección o de engranaje en toda guerra asimétrica. Malí no es Afganistán porque los yihadistas siguen siendo extranjeros en Malí, lo que no son los Talibanes para los pashtunes. El control de las fronteras puede ayudar a acechar a los yihadistas en combustibles, armamento y pick up. Sin embargo, la mayor incógnita radica en la posición de los actores argelinos de los cuales algunos están relacionados a los diversos tráficos mantenidos con las fuerzas del norte de Malí. El fracaso de la intervención en Afganistán puede servir de lección para evitar una ayuda que no hará sino alimentar los circuitos de corrupción del Estado en lugar de apoyar las operaciones descentralizadas. Las respuestas durables suponen una implicación múltiple en el plano militar, político (elecciones, poder legítimo, provincias autónomas al norte), humanitario, económico y diplomático. Próximamente, las tropas francesas deben ser parcialmente sustituidas por las fuerzas malienses y africanas, lo que deberá facilitar la conferencia de donantes. Por otra parte, los controles de seguridad deben ser realizados con el apoyo de las poblaciones, comenzando por los Tuareg que son llamados a entrar en el juego político militar. Los compromisos diplomáticos, como la conferencia de donantes de Addis Abeba, parecen tan importantes como insuficientes para financiar la MISMA de más de 8,000 hombres y reestructurar el ejército maliense, incluso si una misión de intervención de cascos azules se prevé. Finalmente, el apoyo militar debe imperativamente acompañarse de una ayuda internacional de tipo económico (lucha contra los tráficos, revitalización de territorios, desarrollo local, cooperación descentralizad).

Referencias

Gourdin Patrice, “Al-Qaïda au Sahara et au Sahel”. Diploweb.com, 11/3/2012
Hérodote, Géopolitique du Sahara, (142), 2011.
Holeindre Jean-Vincent, Geoffroy Murat (Éds.), La Démocratie et la Guerre au XXIe siècle. De la paix démocratique aux guerres irrégulières, Paris, Hermann, 2012.
Hugon Philippe, Géopolitique de l’Afrique, Paris, SEDES 2012.

PAC 83 – La globalización de una intrusión deportiva El Rally Dakar 2013

Por Josepha Laroche

Traducción: Ulises Aquino Jiménez

Passage au crible n°83

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Administrado por Amaury Sport Organisation, el Rally de Dakar 2013 comenzó el 5 de enero y terminó el 20 de ese mes. Comprende tres categorías de vehículos – motos, automóviles y camiones – y representa, a este respecto, la más grande carrera todo terreno del mundo.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

El Rally París-Dakar se realizó por primera vez en 1979. El itinerario ha variado entre una edición y la otra. En ocasiones su llegada no ha tenido lugar en Dakar, por ejemplo en 1992 cuando la Ciudad del cabo fue preferida. De la misma manera, la carrera no ha partido siempre de la capital francesa. Así, en 2002, el raid se inició en Dakar para terminar en el Cairo.

A pesar de su denominación, desde 2009 esta manifestación deportiva ya no parte de París y no termina más en las playas de Dakar. Ella se lleva a cabo en América Latina, atravesando Perú, Argentina y Chile. En efecto, después del asesinato en Mauritania de cuatro turistas franceses el 24 de diciembre de 2007, sus organizadores decidieron por razones de seguridad anular las pruebas de 2008 y alejarse a continuación del Sahel, quitando pura y simplemente el continente africano. De hecho, esta decisión no generó sorpresa entonces, porque múltiples ediciones habían sido ya perturbadas, incluso amenazadas anteriormente, lo que había obligado a los responsables a anular varias etapas y a modificar la ruta inicialmente prevista.

Marco teórico

1. Una dinámica civilizacional. Norbert Elías mostró en su obra que la propensión de la gente a obtener placer de actos de violencia había experimentado un retroceso en Europa Occidental desde finales de la Edad Media. Eso resulto en una reducción del umbral de tolerancia a la violencia física y una voluntad de rechazarla incluso “detrás de cámaras” (E. Dunning), de castigarla o bien de sublimarla, notablemente gracias al deporte.
2. Una deportivización incumplida. Para el sociólogo alemán, el proceso de deportivización participa de ese lento movimiento de autocontrol y de transformación de las sensibilidades operada por los individuos desde el Renacimiento, paralelamente a la construcción estatal. Ciertamente, esta “liberación controlada de emociones”, permitida por el deporte, libera bien los afectos y la agresividad, pero en un marco estrecho donde la violencia permanece encauzada y limitada en un espacio-tiempo bien circunscrito. Elías analiza el deporte como una actividad donde la economía emocional y pulsional de cada uno es sistemáticamente enmarcada y finalmente sometida. Dicho de otra manera, eso que ellos llaman la deportivización forma a sus ojos una parte constitutiva del proceso de civilización, un dispositivo clave indispensable para la pacificación de los comportamientos.

Análisis

Desde su creación, este raid es el objeto de importantes polémicas y de críticas virulentas. Primeramente, sus detractores señalan el número considerable de muertos y lesionados que acompaña cada año sus palmarés. Trátese de niños heridos mortalmente por los competidores, de espectadores atropellados o de asistentes que se matan accidentalmente a lo largo de la prueba, efectivamente contabilizamos muchas víctimas todos los años. Los periodistas y los organizadores, ellos mismos (Thierry Sabine en 1986), no escapan a esta ley de hierro pagando regularmente con su vida la participación en esta competencia deportiva. En segundo lugar, sus críticos observan también una agresión ecológica y una dilapidación de los recursos energéticos, al mismo tiempo que se trata de luchar de manera drástica contra el cambio climático.

En ese contexto, la CAVAD (Acción Colectiva por las Víctimas Anónimas de Dakar) creada en 2006, demanda la supresión de esta cita mundial. Asimismo reclama la apertura de una encuesta parlamentaria sobre “los actos delictivos del Rally Dakar” en África y ahora en América Latina, así como sobre la relevancia de eventuales desordenes sociales. Finalmente, rechaza permanecer en silencio y ser cómplice “de un rodeo publicitario sobre el continente de la pobreza”. Haciéndolo, estigmatiza la utilización de países en desarrollo “golpeados por el SIDA, el hambre y el sobreendeudamiento” como terreno de juego. Viendo en este evento mundialmente mediatizado “una provocación neocolonialista materializada por un inmenso e inútil desperdicio de dinero y energía”, llama todos los años a su boicot y a la constitución de un frente común contra eso que se parece, según esta asociación internacional, “a una cruzada de negreros, deshonrosa y llena de obscenidad”.

Por su parte, los organizadores pretenden a contrario no ser el origen de ninguna violencia física o simbólica, solamente deploran la “fatalidad” de algunos accidentes. Ellos toman por prueba el entusiasmo de los países involucrados – tanto el de los gobiernos como el de los ciudadanos – africanos ayer y latinoamericanos hoy, que se muestran siempre contentos de recibir este rally. Haciéndolo, los animadores de esta competencia internacional tienen un discurso de legitimación en el cual el alivio del desarrollo ocupa un lugar preponderante: esta prueba deportiva permitirá según ellos atraer los presupuestos, construir las rutas y otras infraestructuras destinadas al bienestar de las poblaciones. Sin embargo, esta lectura paternalista y occidental centrada se debe comprender principalmente como una negación y como la cosificación de sociedades culturalmente alienadas. Esas últimas no van a reclamar la llegada del rally sobre sus territorios, incluso si esta carrera no induce ninguna ventaja económica, ¿salvo para las marcas que se anuncian y compiten? Observamos así que la intrusión deportiva que representa no es percibida por las poblaciones involucradas tal como lo que es, el colmo de la dominación cultural, lo que no es percibido por aquellos sobre los cuales se ejerce. Sin embargo, la sola geografía de las rutas desde la creación de esta manifestación señala ya la dominación del Sur por el Norte.

Los organizadores de Dakar dan a ver – y más aún a validar – este raid como una epopeya donde la búsqueda de resultados, el culto a la velocidad y la explotación técnica se conjugan a la valorización de una forma primaria de virilidad. En el rally, los participantes se enfrentan a lo largo de la prueba a un simulacro de combate efectivamente desprovisto de violencia física entre ellos, confirmando así la tesis de Elías. En efecto, los vínculos sociales que unen los unos a los otros, se encuentran estrechados y más funcionales que antes de su partida en razón de su distanciamiento de las cadenas de interdependencia establecidas. En otros términos, estamos en presencia de una solidaridad orgánica como la entendía Durkheim, esa que reafirma la cohesión del grupo. Pero si el proceso de deportivización se lleva a cabo bien entre los protagonistas, él envía aún más fuertemente su brutalidad al perímetro del recinto simbólico de Dakar. De hecho, sirve como refugio para sus miembros y tiene una función catártica. Infligiendo así una herida colectiva a los países atravesados, testifica los dominios que se agotan y « difunde lo superfluo” en « un desperdicio ostentoso » (Veblen). Todo nos lleva entonces a considerar que en la violencia banalizada – ver naturalizada – de esta intrusión globalizada y reiterada cada año, es necesario observar un proceso de brutalización en marcha.

Referencias

Barthes Rolland, Mythologies, Paris, Seuil, 1957.
Douglas Mary, De la Souillure : Essais sur les notions de pollution et de tabou, trad., La Découverte, 2001.
Elias Norbert, Au-delà de Freud, sociologie, psychologie, psychanalyse, trad., Paris, La Découverte, 2010.
Elias Norbert, La Civilisation des mœurs, [1939], trad., Paris, Calmann-Lévy, 1973.
Elias Norbert, La Dynamique de l’Occident, trad., Paris, 1975.
Elias Norbert, Dunning Eric, Sport et civilisation, la violence maîtrisée, trad., Paris, Fayard, 1994.
Laroche Josepha, La Brutalisation du monde, du retrait des États à la décivilisation, Montréal, Liber, 2012.
Renaud, “500 connards sur la ligne de départ”, https://www.youtube.com/watch?v=Ct5SeoMQhew
Veblen Thorstein, Théorie de la classe du loisir, [1899], trad., Paris, Gallimard, 1970.